El mundo no empieza hoy ni partimos de la nada.

Esta evidencia cuesta hacerla entender a los que ahora se inician en el conocimiento de la Casa de Campo y la contemplan como un parque más de Madrid y solo se interesan en mirar los paisajes que produce la naturaleza, que está bien, pero que es poco para quien busca la máxima experiencia en este lugar único.

En La Casa de Campo lo más importante es lo que no se ve, eso que se intuye a través de los restos abandonados o mal conservados de lo que fue una construcción de un insigne arquitecto.

Igualmente La Casa de Campo tiene más valor por su pasado que por su presente, lo que en ella sucede hoy en día no la diferencia de lo que ocurre en cualquier otro parque de Madrid.

Por lo que fue y los hechos que en ella sucedieron en el pasado, se declaró este Real Sitio como un Bien de Interés Cultural en 2010, la máxima protección jurídica y reconocimiento que puede recibir en España aquellos bienes que lo merecen y que pueden ser materiales o inmateriales; monumentos, jardín histórico, conjunto histórico, sitio histórico, zona arqueológica, pero también; el folclore, la toponimia o la historia de un lugar y sus tradiciones.

A la Casa de Campo se le asignó la categoría de: Sitio Histórico.

Porque su mayor valor reside en la historia que ha sucedido en ella.

Esta declaración sirve, en teoría, para que todo aquel que observe una actuación irregular en el patrimonio y que contradiga la letra de la declaración B.I.C. pueda denunciarlo ante la administración pertinente o aquellos que valiéndose de sus conocimientos y estudios, presenten a Patrimonio ideas de mejora y protección de un edificio o conjunto histórico.

Para los que desconocen el texto íntegro de la declaración de Bien de Interés Cultural le dejamos este PDF para que puedan saber y defender lo que es de todos.