Quiénes somos

Los conocimientos, juntos, suenan como una melodía

Cuando Zaratustra pensaba que había llegado al máximo de su sabiduría, pues había leído todos los textos posibles y discutido su contenido. Un día llegó uno de sus seguidores y le dijo: «Señor se comenta que en Balj hay un sabio del que se dice que es más inteligente que Zaratustra».

Zaratustra se dio media vuelta, entró en la cabaña donde habitaba, cogió su escaso equipaje, y dijo: «Vayamos a Balj a escucha a ese sabio y disfrutemos con sus enseñanzas«.


Por Rafael Pulido Fernández

Llevamos muchos años, demasiados, estudiando los archivos, las hemerotecas y todas las fuentes de información que hablan de la Casa de Campo. Y por fin este esfuerzo se concreta en algo útil. Nosotros pretendiamos que fuera un libro, pero nadie estaba dispuesto a publicarlo.

Soñábamos que un día seríamos un grupo numeroso de entusiastas, como una orquesta de admiradores de la Casa de Campo de Madrid, en torno a una partitura común, de momento, estamos solos.

También imaginabamos que nuestra experiencia personal sería suficiente como para mantener y crear una página como esta. Y ahora no estamos seguros de tener el tiempo suficiente como para publicar toda la información que tenemos.

La investigación minuciosa de cada tema que desarrollamos está siempre respaldada por las fuentes más fiables. Sólo publicamos lo que está demostrado y, sobre todo, ya que es un tema acuciante, pretendemos recuperar la valiosa toponimia de este lugar único de Madrid.

La toponimia es un Bien de Interés Cultural Intangible que no puede menospreciarse. Es la seña de identidad que cada lugar tiene para diferenciarse de otros. Apostando por recuperar los nombres históricos que se reflejan en los documentos oficiales, sobre todo en las escrituras de compraventa, respetando la antigüedad y el uso popular que esos nombres han adquirido.

Aunque recientemente se han publicado libros sobre la Casa de Campo, corrigiendo en algunos de ellos muchos de los errores que circulan respecto a sus orígenes e historia, no es suficiente.

Sabemos que nadie se puede arrogar la exclusividad de la historia, coincidimos en ello, y por eso siguimos estudiando y mejorando los conocimientos, confrontando los documentos que cada día aparecen, por ello estamos abiertos a cualquier información que avale o corrija lo que publicamos. La historia sucedida en la Casa de Campo es patrimonio de todos.

Cuando se ha estudiado y leído tanto, cuando se ha colocado en su lugar cada una de las partes de este sitio, uno siente que su historia es tan potente, valiosa y cautivadora que merece la pena intentar preservarla del olvido.

¿Qué nos sucede a los madrileños con Felipe II?

El Rey más importante de la historia, el más influyente y por ello más criticado, no tiene en Madrid una reseña en forma de estatua ni un monumento, él, que trajo la capitalidad a Madrid y elevó una aldea provinciana a Capital de un imperio y la puso en el mapa.

La Casa de Campo fue un capricho de Felipe II cuya compra unió a la capitalidad de Madrid.

¿Por qué se mantienen abandonadas todas las obras que se hicieron en la Casa de Campo por orden del monarca?

¿Es suficiente con una ligera rehabilitación?

O hay que dotar de contenido a ese Palacete de los Vargas que no es otra cosa que la Casa de Campo de Felipe II.

Sin cejar en nuestro empeño de mostraros la Casa de Campo Real y soñada os dejamos estas consideraciones:

La historia de la Casa de Campo ofrece múltiples versiones y la mayoría falsas, promovidas por instituciones y personas de relevancia que bien harían en actualizarse y corregir todo aquello que se ha demostrado falso.

Que el Patrimonio Cultural y Arquitectónico de la Casa de Campo son los valores menos promocionados y protegidos del parque.

Choca que aún podamos ver construcciones tal como quedaron después de la Guerra Civil 1936-39. Y todo a pesar de la declaración de Bien de Interés Cultural.

Los hechos sucedidos en la Casa de Campo son parte importante de la Historia de Madrid, de España y del mundo y sin ellos la Casa de Campo sería un parque más.


Os dejamos aquí el Catálogo de Elementos Protegidos de la Casa de Campo.