Mentiras y verdades

No os figuréis que vamos a sacar la relación de errores toponímicos de la Casa de Campo, eso ya está bien escrito en otro lugar y no es cosa de aburrir a nadie con los infinitos errores que existen y se mantienen por amor a la indiferencia.

El MITO Y LA HISTORIA

En el siglo XIII y XIX los más importantes historiadores apostillaron que los Vargas de la Casa de Campo y los Vargas de la Edad Media o sea Iván de Vargas, nada tenían de parentesco salvo el apellido, que ya en esa época era común.

Aún hoy algunos pretenden emparentarlos sin pruebas ni documentos o ¿Es simplemente otro mito cómo el de San Isidro?

Iván de Vargas y San Isidro 1083
Fadrique de Vargas (1550)
Fernando de Vargas-Zúñiga Conte (2024)

De Iván de Vargas, que no sabemos cuando nació, pero que se le relaciona en 1083 con la conquista de Madrid y que fue, según la tradición, amo de San Isidro del que paradójicamente sí sabemos cuando nació y Don Fabrique de Vargas cuya casa de campo compró Felipe II a su viuda Antonia Manrique de Valencia en 1561, hay 478 años casi cinco siglos de distancia.

De la compra del Palacete de los Vargas en 1561 a Fernando Eugenio Vargas-Zúñiga Conte aristócrata actual hay 463 años casi cinco siglos de distancia. Ni su apellido ni su genealogía le relacionan con los Vargas de la Casa de Campo ni posteriores.

Hay MÁS de quinientas mil personas con el apellido Vargas. Y más de treinta mil familias Vargas que no tienen ninguna relación conocida entre ellas.

El apellido Vargas lo llevan infinidad de personas de todos los estamentos.

Árbol genealógico de Fernando de Vargas-Zúñiga Conte

Conclusión:

Iván de Vargas y San Isidro no tenía ninguna vinculación conocida con Fabrique de Vargas, salvo la que se «inventaron» la familia Vargas del siglo XVI para tener un santo en la familia. Lógicamente ni Iván de Vargas ni San Isidro tienen nada que ver con la Casa de Campo que se formó a partir de 1561, casi cinco siglos después.

¿Aún piensas que los Vargas dueños de la Casa de Campo eran la única familia con el apellido Vargas?


Sabemos la fecha de compra de la Casa de Campo a la viuda de Francisco de Vargas, Antonia Manrique de Valencia, sin embargo es uno de los clásicos errores que todos los historiadores cometen, cuando no debía de ser así, ya que el documento donde se recoge la fecha exacta está al alcance de todos, y digo de todos, porque la II República hizo un facsímil muy divulgado, que nosotros tenemos, del documento en sí.

Aunque las negociaciones son anteriores y las escrituras se hacen en septiembre de 1561, la entrega se produce sin ninguna discursión, ya que queda reflejada en la documentación:

El 1 de agosto de 1561

La Casa de Campo de Felipe II

    La falsa idea de que Felipe II compra la Casa de Campo de los Vargas como finca de caza. Es un error aburrido y repetido y sin ningún sustento documental ni lógico.

      Quizá se produce por el hecho de que el monarca incluye en El Pardo la Casa de Campo para que se rija por las mismas leyes que este cazadero.

Felipe II compra la Casa de Campo como jardín de su Palacio o Alcázar y lo deja bien claro en todos los documentos. La Casa de Campo era una zona ajardinada donde la caza estaba perseguida y prohibida, caza en todo caso accidental ya que la finca estaba rodeada en 1561 de huertas y campos de labranza.

Se une al anterior error el decir que Felipe II pretendía unir la Casa de Campo y El Pardo. Otro error de cálculo ya que nunca lo pretendió, la Casa de Campo de Felipe II se reducía a una pequeña parte de lo que ahora conocemos como la Casa de Campo y hacia El Pardo la finca acababa en lo que hoy es el Vivero Municipal muy lejos de El Pardo. En el plano de Teixeira queda bien reflejado el tamaño de la Casa de Campo.

Esta unión no se produce hasta el reinado de Felipe V, gracias a las compras de Fernando VI cuando era Príncipe de Asturias.

Puerta de entrada a la Huerta de Plantas Medicinales

La creencia de que en la Casa de Campo hubo un huerto de plantas medicinales desde los tiempos de Felipe II. Error que solo se sostiene cuatro siglos después y solo unos pocos años cuando el 1 de noviembre de 1929 se formalizó un contrato de cinco años entre el Comité Nacional de Plantas Medicinales y la Intendencia General de la Real Casa y Patrimonio, contrato que no fue renovado. Finalizada la Guerra Civil de 1936 la Delegación del Ministerio de Agricultura solicitó su renovación que fue acordada por la Comisión Municipal Permanente el 11 de agosto de 1939.

Felipe II tenía su propio huerto de planta medicinales en otro lugar cercano al Alcázar, pero fuera de la Casa de Campo.

Felipe V

Es normal oír decir que Fernando VI declaró Real Bosque a la Casa de Campo y no fue así, la declaración fue hecha por Felipe V el día 20 de febrero de 1746 .

Otra cosa es que la declaración fue una petición de su hijo.

Otro error histórico es considerar que la Casa de Campo por el simple hecho de ser Bosque Real o Real Bosque estuviera cubierta de árboles, nunca jamás la Casa de Campo tuvo ni la mitad de los árboles que ahora posee y pinos tenía los imprescindibles o sea pocos. Unido a este error está el de creer que fue durante la Guerra Civil 1936-39 cuando se desforestó la Casa de Campo, cosa totalmente falsa.

La asignación errónea de autoría a ciertas construcciones llevaría a ampliar los errores a límites que no son convenientes, por eso nos limitaremos a dos de los más evidentes:

Tapia de Villamanín

La tapia o cerca de la Casa de Campo no se construyó por orden de Carlos III, sino de Fernando VI por lo cual no fue Sabatini su autor único, sino otros autores como Saqueti, Manuel de Molina o Ventura Rodríguez, sí es cierto que Sabatini mandó reparar la tapia o corregirla en infinidad de momentos, pero solo eso.

Lo mismo sucede con las Rejas cuya construcción y diseño se debe a Ventura Rodríguez.

Puente de la Culebra de Pedro de Ribera

Más llamativo es el error de atribuir a Sabatini los puentes de la Casa de Campo: Sabatini no construyó ningún puente en la Casa de Campo y creo que en ningún otro sitio.

Los autores de los puentes, pasa por Pedro de Ribera, Miguel de Molina, Narciso Pascual y Colomé, Enrique Repulles Segarra y otros.

Bueno por hoy ya está bien ya seguiremos otro día...