Poco después de publicar el libro “La Casa de Campo Parque Histórico”, Luis y yo

comenzamos una revisión a fondo de su libro y de los datos que en él aportaba.

Fue el retorno a los legajos del Archivo General de Palacio, que ya habíamos abandonado.

Fueron muchas mañanas, de muchos años las que estuvimos allí como arqueólogos de los documentos. Fuera invierno, primavera o verano, a primera hora, ya estábamos en Palacio tratando de solucionar las incógnitas.

Juntos fuimos descubriendo los errores y confirmando los aciertos.

En 2009 todas sus reivindicaciones estaban recogidas en el expediente de la declaración de Bien de Interés Cultural para la Casa de Campo.

Hace unos años cuando se iba a cumplir el III centenario del nacimiento del arquitecto Sabatini, le propuse a Luis retomar las correcciones de su libro “La Casa de Campo Parque histórico” con todos aquellos datos que habíamos recogido en el pasado y los nuevos. Luis no se mostró muy convencido

¿Para qué corregir un libro que ya no se va a publicar?

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