El autor del diseño de esta fuente fue el arquitecto Manuel Molina Monasterio responsable de las últimas fuentes de la Casa de Campo como la Fuente del Pajarito, las ornamental Fuente de las Moreras y la ruinosa Fuente del Dante.

Sabiendo que en origen el nombre de la Plazuela donde está la fuente es el de los Siete Hermanos, se conserva el de Siete Hermanas porque así se la nombró cuando se hizo y así es conocida.

Hay que conservar esta riqueza inmaterial que es la toponimia, tanto la popular como la oficial.

Es una fuente toda de granito menos el tejadillo, que hay que restaurar, que es de piedra de Colmenar y un sólo caño se conserva en buen estado, así como la solera, también de granito, que la bordea.

Se construyó en 1936 y su finalidad era dar de beber a los muchos visitantes del Pinar de las Siete Hermanas.

Durante la Guerra Civil su caudal estuvo cortado y aunque a la Plazuela de los Siete Hermanos se la llamaba Plazuela del Agua, era debido a un camión cisterna que la suministraba.

En el centro de la plazuela también hubo una fuente de pájaros que no sobrevivió a la guerra.

En la fuente sobre el rótulo de Ayuntamiento de Madrid 1936, podemos ver en el granito las huellas borradas de otra inscripción que suponemos hacía alusión a la República.

Junto a la fuente aún se conserva esta casa que perteneció al albergue primitivo que en origen ocupaba ambos márgenes del Arroyo de los Meaques. En ella también se impartieron clases de jardinería.

La fuente recuperó los adornos que tenía a ambos lados en 2020 por la petición que realizamos a la Dirección del Servicio de Conservación de Monumentos del Servicio de Restauración y de Patrimonio Histórico del Área de Gobierno de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid. Estos adornos los perdió a finales de los años 60 del siglo XX.

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