Un futuro incierto

¿Cuestión de tiempo?

La degradación total de la Casa de Campo es una cuestión de tiempo.

¿Qué podemos hacer?

Lo primero es aceptar que nos toca compartir este lugar incluso con aquellos que lo destruyen.

¿Hay alguna forma de ponernos de acuerdo?

La Casa de Campo entristecida y silenciosa por el derrumbamiento de su grandeza, árida y abandonada a la suerte de otros negocios. Algunos buscando afanosos el catálogo de los remedios a sus males. Y como siempre el otro tiene la culpa. Pero no nos engañemos nosotros somos también culpables junto a las clases directoras. No se vislumbran con claridad las soluciones, defendemos lo antagónico, pero ello no debe ser una sentencia condenatoria contra nadie. Por fortuna, algunos valores nos hacen incapaces de quitar importancia a cuanto vemos y sentimos, siempre estamos dispuestos a defender la Casa de Campo por el único placer madrugador de participar en algo que nos importa. Somos seres únicos que como las hormigas unimos los esfuerzo para sustituir en nuestras mentes los caminos de zahorra y escombro por la buena tierra.

Vamos pisando el polvo de los anteriores caminantes, esos que con una ambición ardiente unieron su existencia colectiva, siempre nos parece que hicieron poco, no les perdonamos el grave delito de ser seres normales. Un día nos enteramos de que existe algo en el mundo capaz de elevar los ojos en vez de mirar a la nada; nos damos cuenta de que hay proyectos levantados por personas humildes que cumplen su papel de cambiar las cosas. A veces en la búsqueda de soluciones nos cruzamos con espíritus desencantados de vuelta de los esfuerzos inútiles. Nuestro empeño resucita en ellos el ánimo que les falta y sienten la honda alegría de los que no están solos. La oscuridad que parecía eterna se ilumina y vuelven a recobrar su juvenil empeño. Una inmensa e inesperada misión parece abrirse en la derrota diaria, los amargos recuerdos se olvidan y reflexionan sobre lo difícil que es soportar esta pobreza de ánimo después de haber sido ricos.

Sin interrumpir el curso de la historia salimos al camino con exceso de voluntad pasando de la idea a la acción y pensando que lo que es bueno para nosotros es bueno para la Casa de Campo.

LA CASA DE CAMPO COMO EJEMPLO DE ENTORNO ECOLÓGICO – HISTÓRICO

La Casa de Campo de Madrid es sin duda un lugar excepcionar en el mundo dentro de lo que se entiende como Parque Natural – Histórico.  Ninguna capital europea cuenta con un entorno tan privilegiado para desarrollar un programa de cómo se debe tratar la naturaleza y la historia.

Ya no es un capricho, sino una necesidad el transmitir a los habitantes de una ciudad como Madrid, que los tiempos del coche (motos, bicicletas de montaña etc.) en las zonas naturales se han acabado, que es hora de apostar por un sistema acorde con lo que queremos que sea el futuro saludable de una ciudad. La Casa de Campo puede ser ese escaparate donde se miren otras ciudades como modelo de una política de buenos usos dirigida a la preservación de la naturaleza y la cultura.

La gente vendrá a la Casa de Campo a buscar, lo que le falta; tranquilidad, historia y aire puro. Donde las personas serán protagonistas de los cambios que se produzcan. Será como un paraíso temático de los buenos usos de la naturaleza y sus recursos.

La Casa de Campo sin coches.

Los coches son un elemento contaminante de todo ecosistema natural, tanto por su contaminación atmosférica y acústica, como por ser un artilugio perturbador en un entorno natural. La Casa de Campo cuenta con cuatro estaciones de metro y otros tantos autobuses para acceder a sus instalaciones, por lo que no es necesario el uso del coche.

Se cerrarán todas las vías de entrada a coches ajenos al parque y se suprimirán los aparcamientos que recuperarán su estado natural, sin ninguna excepción. Es una contradicción que la Casa de Campo se use como aparcamiento disuasorio de Madrid y nadie haya levantado su pancarta reivindicativa. La Casa de Campo tiene que estar más restringida que la propia capital. 

Los coches de servicio interior tienen que ser sustituidos paulatinamente por coches eléctricos no contaminantes y de características integradoras en el medio natural, con limitación expresa de velocidad y ruido. Esto servirá de ejemplo desde la administración que podrá exigir a los demás lo mismo que ella cumple.

Las vías de circulación interior serán las imprescindibles, y se suprimirán aquellas que trazadas en zonas de alto valor, como el Pinar de las Siete Hermanas agreden un Sitio Histórico.

Se utilizará preferentemente los paseos a pie y excepcionalmente y en vías asfaltadas la bicicleta de paseo para los desplazamientos interiores imprescindibles.

Autosuficiente.

Que el riego de sus plantaciones sea con agua reciclada y todo el consumo eléctrico proceda de energías renovables, sin que estas dañen el paisaje.

En cumplimiento de la normativa europeas sobre tendidos eléctricos, se obligará a las eléctricas a soterrar las líneas de alta y media tensión o mejor suprimirlas. Es poco edificante ver las torretas eléctricas distorsionar el paisaje y emitir radiaciones nocivas para la salud. Cables que son una barrera para las aves. Las eléctricas, además, podan “sin criterio” los árboles para adaptarlos a su conveniencia e incluso talando los que se interponen a su cableado.

Recuperación de los valores naturales.

Se concederán bajo condiciones expresas, autorización para recuperar el pastoreo en la Casa de Campo, bajo la supervisión de una o varias personas para evitar que las ovejas invadan zonas protegidas o replantadas.

La Venta de El Batán, será reconvertida en una escuela granja donde los pastores guardarán el ganado por las noches después del pastoreo. Allí se impartirán cursillos de trato y conocimiento de los animales que habitan en la Casa de Campo, desde los insectos a los mamíferos.

Repoblaciones consecuentes con su entorno.

Las repoblaciones se harán con especies propias del ecosistema al que se trata de recuperar o sustituir. Con ello se crearán masas forestales de diferentes especies según la característica del terreno. Se cuidarán todas las especies con igualdad de criterios, abandonando la repoblación “estándar” de pinos. Se respetarán las alineaciones históricas que serán siempre replantadas con la misma especie dominante. Al mismo tiempo se conservarán los miradores sobre la cornisa de Madrid, con replantaciones que no tapen en poco tiempo la visión.

Los únicos arroyos de Madrid.

La Casa de Campo posee los últimos vestigios orográficos e hidrográficos de lo que fue un Madrid agrícola y ganadero y cuyo origen semántico está ligado al agua.

Se cuidarán los cauces de los arroyos como ecosistemas sensibles, no se verterán aguas sin depurar y se recuperará el antiguo sistema de riego y traslado de aguas de las “Caceras” como un ejemplo del valor que el agua posee. Sería una recuperación única y ejemplar.

Se potenciará el valor del agua en todos sus apartados; fuentes, embalses, lago, caceras, arroyos etc.

Especies invasoras.

Se cuidará de que no proliferen las especies que, introducidas de manera accidental o provocada, controlando tanto plantas como aves, tortugas, peces o gatos abandonados.

Poda.

Se cuidará la poda y siega de los terrenos, para prevenir la desaparición de plantas nutricias para ciertas especies interesante de insectos, especialmente lepidópteros (mariposas) y coleópteros (escarabajos). Con ello se potenciarán zonas de recuperación similares a las del Encinar de la Encina de San Pedro.

Escuela de Jardinería

Madrid siempre pendiente de una escuela de jardinería, encontrará en la antigua Faisanera o pabellones de los Recintos Feriales, un lugar idóneo para la instalación de esta actividad docente reclamada desde siglos atrás. La Faisanera, concretamente, está situada en un lugar privilegiado para esta escuela tanto por su situación geográfica, próxima al metro Príncipe Pio, como por poseer terrenos cercanos y jardines donde poner en práctica lo aprendido.

La Casa de Campo Sitio Histórico.

La historia de la Casa de Campo está ligada a la capitalidad de Madrid, por ella pasaron todos los protagonistas de la Historia de España desde los Reyes Católicos a nuestros días. En ella se fraguaron culturas desde el paleolítico, pasando por los romanos y lo más importante, en ellas están aún los vestigios de esos acontecimientos. La configuración de la Casa de Campo hace posibles aún que se puedan señalar los lugares donde habitaron estas civilizaciones, sin apenas cambios orográficos.

La recuperación de la Casa de Campo de los Vargas.

La situación de la Casa de Campo de los Vargas o Palacete de los Vargas hace de este edificio el adalid de cualquier futuro proyecto sobre el Parque. En él se desarrollarán toda actividad informativa y culturales de la Casa de Campo.

Se recuperará su entorno; El Jardín Reservado, la Galería de las Burlas, la Fuente del Águila (almacenada en el Campo del Moro), las fuentes de Húmera, Rodajos, Cobatillas, de la Cotorra etc.

Con los últimos descubrimientos sobre la Galería de las Burlas, en ella se puede, gracias a los nuevos recursos técnicos, recuperar visualmente lo que fueron catalogadas como una de las Grandezas de España del siglo XVI.

Rutas.

Desde la Casa de Campo de los Vargas partirán las diferentes rutas culturales y de otra índole, que naturalmente se harán a pie, y salvo excepciones se utilizará otro sistema de transporte.

Rutas tan necesarias como la del agua, la del cambio climático, entornos naturales, aprovechamiento de los recursos.

Rutas también históricas como: la Casa de Campo de los Austrias y la de los Borbones, las Calzadas Romanas y las Cañadas Reales, con la participación de los pastores de la propia Casa de Campo y la utilización del Puente de la Culebra como puente de conteo, para lo que fue construido.

Integración paulatina de todos los espacios disgregados.

Paulatinamente se irán incorporando a la Casa de Campo los diferentes espacios que bajo criterios del pasado llevaron en su momento a la disgregación. Hay que revisar todas estas instalaciones y ocupaciones injustificadas e ir recuperando estos terrenos para disfrute de todas las personas y beneficio de la propia Casa de Campo que la eximiría de ruidos, circulación de vehículos, cables y actividades molestas para este ecosistema único.

Entre estos lugares se encuentran:

Los Recintos Feriales: Con una superficie de 676.000 m2. Para su integración se suprimirán las barreras que en su momento se crearon para impedir el paso, como la alambrada que transcurre paralela al Arroyo de los Meaques desde Neveros a la Huerta de la Partida y otras similares que impiden la libre circulación de personas entre espacios que son un todo.

La Escuela de Cantería: Con una superficie de 40.156 m2. Ocupación moderna dentro de la Casa de Campo, se deberá buscar un lugar más adecuado para tener en depósito materiales que llevan allí desde su creación en el año 1960. El almacén de cantería ocupa un lugar histórico en lo que fueron las yeguadas reales.  

Club de Campo: Con una superficie de 1.401.450 metros cuadrados, es otra herencia del pasado incompatible con la Ley que manda que la Casa de Campo sea para uso y disfrute de los madrileños, “todos” no una élite que perpetúa el más claro despotismo de unas prácticas que en ninguna circunstancia debe permitirse.   

Venta de El Batán: Con una superficie de 70.997,5 metros cuadrados. Segregación que mantiene una parcela de la Casa de Campo de todos en manos “privadas” para actividades nada edificantes. La Venta de El Batán a la que se le deben suprimir el carácter de Escuela de Tauromaquia que nunca tuvo, deberá tener, aprovechando sus instalaciones, una finalidad didáctica como Escuela Granja que promueva todo lo contrario que ahora. Hay que suprimir las alambradas que crean un efecto segregador.

Albergue Juvenil, ahora MENAS: con una superficie de 28.000 m2. Hay que recuperar como mal menor el antiguo albergue integrado en la Red de Albergues y Refugios Juveniles de la Comunidad de Madrid. Dentro del recinto se encuentra; el Centro de recuperación de Rapaces Nocturnas Brinzal, (ARBA) Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono, la carpa de la Escuela de Circo Carampa.

Parque de Atracciones: Con una superficie de 128.225 metros cuadrados. Es sin duda una de las causas que más daño produce a la Casa de Campo; daños por la utilización del coche para desplazarse a sus instalaciones, masas ingentes que irrumpen en el lugar con la sola intención de montar en unas atracciones que bien podían estar en otro lugar. La generación de ruido que no solo perjudica al propio parque, sino que también a las viviendas de la zona, ruido provocado por las atracciones y la música que se utiliza como reclamo.

Parque Zoológico: Con una superficie de 200.000 metros cuadrados y 53.000 de aparcamiento. Otro ejemplo de utilización cuyos beneficios no recaen en la propia Casa de Campo, pero sí sus inconvenientes; tráfico, desplazamiento de personas y utilización privada de un lugar de todos.

Canal de Isabel II: Con 6.300 m2 ocupados a la Casa de Campo al principio de los años 1970, está red de distribución de agua potable División de Casa de Campo debiera buscar un lugar fuera de la Casa de Campo.

Teleférico: Con 1.500 metros cuadrados de superficie, el teleférico, ahora municipalizado, debe promover alguna actividad relacionada con la naturaleza y crear visitas aéreas donde se informe de la historia de la Casa de Campo. Se suprimirán los aparcamientos y el acceso desde el Camino de Rodajos naturalizando el terreno en ambos casos. El acceso por el Pinar de las Siete Hermanas es una de las agresiones más graves que se han cometido en la Casa de Campo.

Como proyectos a largo plazo, todos los elementos que se citan a continuación deberían ser soterrados:

Metro: los terrenos ocupados por la línea 10 de metro entre Lago y Casa de Campo son de 2600 metros.

La vía del Norte: Los terrenos que ocupa la antigua, ahora de cercanías, desde el Puente de los Franceses a la antigua puerta de Aravaca, con 2.300 metros de longitud

La Carretera de Castilla: con 2.500 metros de longitud.

Tendidos eléctricos: con sus correspondientes torretas y la subestación cercana a la vía del tren de cercanías.

Las líneas eléctricas que atraviesan el Parque se apoyan sobre elevadas estructuras tipo torre, elementos altamente artificiales en el medio por el que discurren. Y su incidencia se produce sobre la avifauna y el riesgo de incendio por contacto con el arbolado.

Las normas europeas prohíben estas líneas eléctricas y aprobó su soterramiento, y en vez de hacerlo se adapta el entono a las líneas con decretos como el siguiente:

“Para limitar los impactos paisajísticos sobre el Parque, teniendo en cuenta lo establecido en el Real Decreto 223/2008, de 15 de febrero, por el que se aprueban el Reglamento sobre condiciones técnicas y garantías de seguridad en líneas eléctricas de alta tensión y sus instrucciones técnicas complementarias ITC-LAT 01 a 09 (BOE 68, 19 de marzo de 2008), sobre distancia del arbolado a trazas de líneas eléctricas, se debe disponer a ambos lados de la traza árboles de las mayores dimensiones posibles para proceder al enmascaramiento de los apoyos e hilos conductores. Simultáneamente, en las partes de las trazas por debajo de los cables, se utilizará vegetación arbustiva y arbórea de pequeña talla y reducida combustibilidad, que nunca llegue a alcanzar la altura mínima de los hilos en máxima dilatación”. Con respecto al riesgo de incendio por contacto del arbolado con los hilos conductores, anualmente, antes del comienzo del periodo de crecimiento vegetativo de la vegetación, se realizará un análisis exhaustivo del arbolado debajo de la traza, procediendo a extraer aquella vegetación, arbustiva o arbórea que a corto o a medio plazo, pudiera entrar directamente o indirectamente (oscilación de la vegetación o de los cables) con el tendido”.

Medidas urgentes:

Supresión paulatina (en dos años) de la circulación de vehículos privados por cualquier carretera de la Casa de Campo.

Control de paso de las bicicletas por el Parque.

Con los datos siguientes se pone de manifiesto que existen suficientes trayectos para desplazarse sin tener que recurrir a las sendas:

Carreteras de zahorra (anchura media 6 metros) 63.719 metros.

Carreteras asfaltadas (anchura media 7 metros) 31.965 metros.

Sendas (anchura media 0,75 metros)176.572 metros.

Cortafuegos (anchura media 6 metros)126.921 metros

La superficie ocupada por estas vías es de 136, 65 hectáreas lo que supone el 7% de toda la Casa de Campo.

Estas propuestas no requieren grandes presupuestos, hacerlas no vale casi nada, sólo voluntad política, pero son ricas en valores esenciales para el presente y el futuro de los habitantes de Madrid. La función ejemplarizante de los ayuntamientos es la base para crear conciencia de que las cosas deben cambiar. Los retos que plantea el cambio climático, sin que nosotros seamos los únicos responsables, están pidiendo medidas urgentes, el futuro se presenta lleno de retos que todos tenemos que asumir.

Los usuarios de la Casa de Campo demandan estas actuaciones como una necesidad, a ustedes les corresponde llevarlas a cabo.

No se debe dejar «todo» el poder de decisión a los político o responsables de turno, y que ellos puedan hacer lo que quieran con la Casa de Campo sin que haya ningún resorte legal para impedirlo.

Deja un comentario